MARRAKESCH.

Callejas de la Medina.

Los jardines de la Menara con el Atlas al fondo.

La bulliciosa plaza de Jemaa El Fna.

Salida de la carrera.

Ahi estaba hace una semana, mentalizado para correr al dia siguiente otro marathon mas. El pasado domingo fue la carrera. Habiamos llegado el viernes tarde. Mis acompañantes en estocasion fueron Amelia y la pareja de amigos de Caceres Angel y Mamen. Amelia y Angel correrian la media Maraton. Despues de instalarnos en el hotel y recoger los dorsales, empezamos a saborear un poco la exotica y caotica ciudad. Habia que tener cuidado con las comidas y las bebidas, por si las moscas, por lo menos hasta finalizada la carrera. La comida muy aceptable, si vas a los sitios donde van ellos, se come bien y barato. A la hora de comer ibamos a esos lugares, bien en la medina o en nuestro barrio, Gueliz. Para cenar buscamos los sitios que habia localizado Mamen en los foros de internet. Pizzerias, en las que se tomaba vino y cerveza. No es facil encontrar sitios donde vendan alcohol, salvo en hoteles y algun establecimiento caro, nosotros tuvimos suerte pues al lado de nuestro hotel habia un bareto que ponia cervezas a esgaya. Flag especial, era la marca, no estaba mal ni de calidad ni de precio.

La Medina y su plaza Jemaa el Fna, son una pasada. Un autentico lio, una marabunta de gente y todo tipo de artilugios rodados, especialmente motos tipo mobylettes. Tambien circulaban carromatos, carretas tiradas por burros, carretillos, coches, etc. Todo esto mezclado con los viandantes, os lo podeis imaginar, una liada del copon. Habia que andar con 100 pares de ojos, pues todo eran pitidos y esquives. A pesar de este follon no vimos ni un accidente. En esta famosa plaza patrimonio de la Humanidad, habia que andar al loro, con todos, en especial en los corrillos de los encantadores de serpientes, pues si no andabas vivo te podias encontrar en un pis pas con un super collar vivito y coleando. Multitud de pequeñas tiendas que venden de todo, y callejuelas laberinticas componen el corazon de la Medina. Tomar un cafe en cualquier terraza de la plaza es un autentico espectaculo, puedes pasar horas muy entretenido. Otra curiosidad es la hora de las llamadas a los rezos, con tantas mezquitas, se prepara un buen concierto, para mi el "mejor" era el de las 6 de la mañana, me despertaba y adios sueño. Eso y el continuo trasiego de coches y motos a todas las horas de dia y la noche.

Vamos con la carrera. El domingo despues del desayuno, nos fuimos andando a la avda de la Menara, punto de salida y meta de la carrera. Los de la media salieron 1/2 media hora antes. A las 9 salio el marathon. Hacia un poco de fresco pero despues de un rato ya atizaba lorenzo y se sudaba. Despues de calentar un rato sali tranquilo. En el km 5 me junte con Raul, de Badajoz, pasamos la media en 1 h 38' y fuimos juntos hasta el km 33, ahi mi ritmo bajaba y me quede solo. Iba suave y disfrutanto del panorama, pero sufriendo un poco pues el calor y la falta de isotonicos en los avituallamientos, me producian algun tironcillo. El objetivo de bajar de 3 h 30', practicamente lo tenia conseguido, pero no habia que embobarse. Cruce la meta en 3 h 24'. Ya en Leon, me entere que habia corredores etiopes y keniatas que hicieron unos tiempazos. Alli no los vi. Con la medalla al cuello me fui para el hotel.

El lunes contratamos a Hasch, un guia (era del un pueblo del Atlas, estabamos a 50 kms aprox.), para que nos llevara por la medina a ver varias cosas, el palacio de Bahia, la escuela coranica la Medersa, los gremios de artesanos y lo que el quisiera. Asi, da gusto, pues vas a tiro fijo. El guia es necesario.

Por la tarde estuvimos paseando por los jardines de la Menara.

El martes nos fuimos de excursion al Atlantico a Essaouira. Antes paramos en un centro de extracion del aceite de argane. Essaouira, es un pueblo pescador y turistico, con buenas playas. Aqui por modico precio te pones de pescado y marisco hasta las trancas. Los cuatro comimos por 250 dirhans (12€ aprox), incluyendo las ensaladas y la bebida (agua o refrescos). Estuvimos dando un garbeo por el puerto, viendo como descargaban el pescado de los barcos y luego dimos una vuelta por la ciudad y su medina.

En esta zona son muy fans del barsa, estaba el escudo y las camisetas por todos los sitios.

El miercoles vinimos para casa. Lo pasamos bien, es un sitio muy recomendable.

Dentro de 15 dias, me toca el marathon de Sevilla, sera mi quinta participacion. Saludos.